Fuente de reducidas proporciones en la intersección de Landaburu kalea con Arenalde kalea (antes Zerrajeria kalea), cerca del caserío-restaurante Arenalde Maitea
La fuente de la Humillación
O… ¿ha
sido ideada para niños/as solamente? o… ¿para los cuadrúpedos de compañía,
ahora tan en boga en el mundo urbanizado, que han sido rebajados o bajados al
inframundo animal para ser considerados o convertidos y conocidos con el eufemístico
nombre de “mascotas”?
O, tal
vez, ¿el Ayuntamiento de Amurrio, haciéndose eco de la normativa y queriendo
cumplirla, ha adaptado la fuente para las personas con escasos recursos en
altimetría?
La
realidad es que utilizando parte de las piedras del patín que se encontraba
dentro de la finca que ocupaba la casa señorial de la familia Rubenach, el
ayuntamiento amurriarra ha conseguido esta imagen que, en las fotos, suscita
cierto ejercicio físico y equilibrio a la hora de intentar saciar la sed con el
líquido elemento. Y no por culpa de las labradas piedras del antiguo patín que
dan a la fuente cobijo y cierto empaque artístico sino por la escasa altura de
la misma.
Casa
señorial de estilo alemán de la familia Rubenach, que mandara construir Johan
Rübenach a finales del XIX, aprox. (Fondo fotográfico de la A. E. AZTARNA E. E.)
Fuera de la foto (a la izda. del chico) se encontraba la fuente. Más o menos en el emplazamiento actual
Vamos. Que
no todos/a salen victoriosos, sin mojarse, en esta batalla con el agua que
emana de esta fuente tan especial. Por altura y por su desagüe tan a desmano
como peculiar e inadecuado. ¡Y... nada decimos de la presión del agua!
Dos vistas de la empequeñecida fuente con el anómalo o inusual desagüe alejado de la lógica caída del agua
Pero lo
dicho. Pudiera ser que la fuente está ahí, sólo para saciar la sed de las mascotas
que, con sus amos/as, a la misma se acercan.
Para
conocer no tanto la historia de la fuente, pero sí de la familia Rubenach, en
cuya cercanía construyó la casa señorial, es aconsejable adentrarse en las
páginas de la revista Aztarna (nº 51.
Diciembre 2018), editada por la Asociación Etnográfica homónima, donde Jabier Aspuru hace una semblanza de
la venida de Johann Rübenach a
Amurrio. Esta casa de estilo alemán, recibió el nombre de “Villa Modesta” en
honor a su primera hija: Modesta Rubenach Lezama.
La fuente
se emplaza en el lugar de otra anterior. En realidad, es la misma pero ahora
con unas dimensiones menores o más baja, instalada (o reinstalada) tras la
urbanización de toda la manzana para levantar viviendas de protección oficial
(VPO).
Pilares y
enrejado que cercaban la finca de los Rubenach, dan acceso al Parque de las Energías
Renovables en el Alto Ibarrola, junto al antiguo depósito de aguas, a las
afueras de Amurrio, en dirección Arespalditza/Respaldiza
Por otro
lado también, parte del cerramiento (pilares de piedra tallada, verja y puerta
enrejada) se puede ver, después de un tiempo de estar apilado en los almacenes
municipales, en el acceso -y como portada del mismo- del Parque de las Energías
Renovables “Aresketamendi” (Al principio de su inauguración se escribía
separado “Aresketa Mendi”. “Aresketagaina”
hubiera sido el nombre toponímico más apropiado).
En definitiva
y volviendo al principio. Cada vez que se pasa al lado de la fuente viene la
pregunta: ¿Qué día tuvieron los operarios o el arquitecto municipal o, incluso,
en última instancia, el alcalde anterior para colocar la fuente de esa manera,
tan a pie del suelo que casi obliga a arrodillarse o ponerse en cuclillas para
saciar la sed del momento?
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