El "antes" y el "después" del roble americano afincado en el Parque Pitiminí de Amurrio
Uno de
los dos Robles americanos del parque se ha despedido para siempre
El
Boletín Informativo Municipal de Amurrio “Hauxe da”, en el último nº 517 de
28-02-2014 daba la crónica de una muerte anunciada emulando a la famosa novela
del escritor Gabriel García Márquez.
Uno de
los dos árboles emblemáticos y característicos del parque municipal tenía que
ser talado, debido a su estado de deterioro –estaba en fase terminal– atacado
por hongos de pudrición y, en parte, desgajado en su base con el peligro inminente
de caída en caso de futuros fuertes vientos.
Comienza la cuenta atrás. Apenas unos minutos para que... cien años acaben en el suelo
Ambos
ejemplares centenarios pertenecientes a la especie de roble americano, desde
hace algunos años, veían menguados su copa, brazos y ramaje, disminuyendo
el volumen de los mismos.
Desde
la colocación de la escultura “GUK” conformaban con ella un triángulo perfecto
donde los dos árboles ocupaban los ángulos extremos de la base triangular y la
escultura el vértice superior del mismo.
Las
tres esculturas (las naturales y la artificial) dibujaban en el espacio un
triángulo equilátero que hoy (12-03-2014)
se ha visto truncado con la caída, por medio de la motosierra y la ayuda del
empuje consiguiente, de una de ellas.
Poda y talado. El tocón desgajado del suelo junto con la raíz. Y al camión pluma
Comenzadas
las labores de derribo a las 08:15, las mismas han proseguido hasta las 10:00.
Tiempo dedicado, no tanto a la tala como al troceado y carga de sus restos leñosos en
el camión.
En el ínterin,
el árbol superviviente (de momento) ha sido sometido a un podado y talado de
algunos de sus brazos y ramas que colgaban ya secos, aunque en un futuro
próximo puede correr la misma suerte que su hermano que hoy ha dejado de
existir definitivamente.
El "antes" y el "después" del otro roble que de momento queda en pie... ¿hasta cuándo?
Al
final, el árbol –muerto y troceado– ha sido llevado al “matadero” pasando a
mejor vida tras decenios de años de cobijar bajo su ramaje, de los rigores del
calor, a las y los amurriarras y forasteros. Su lugar será ocupado por otro
ejemplar a determinar, con el deseo de que esté a la altura de su predecesor.
Esperando la vuelta del camión para llevarse los últimos restos del tronco de lo que fue un roble americano con más de 100 años y que hasta el día de hoy ha estado ahí, en pie
NOTA 10-01-2016
30-12-2015, ocupó el, hasta ese momento, roble americano superviviente, tras la tala por enfermedad de su hermano gemelo el día 12-03-2014.
Desde la muerte del mismo se había quedado huérfano y tenía los días contados, pues también estaba herido de muerte.
La escultura “GUK” situada en el parque necesita un limpieza, se deberían de borrar cuanto antes todas esas pintadas que le han hecho.
ResponderEliminarEn cuento al roble americano que queda en pie, si la intención del ayuntamiento es talarlo en 1 o 2 años, mejor hacerlo ahora. Aunque no esta tan deteriorado como el otro, se estado deja bastante que desear.