Caserío a desaparecer, dirección Luiaondo (Norte), con sus horas contadas... si nadie lo remedia |
El caserío que venció a la carretera pero sucumbió a la acera
El caserío que tienes presente, ante tus ojos, tiene escrita la fecha de su defunción. Al parecer, según recoge la prensa estos días, el Ayuntamiento ha decidido que estorba, puesto que impide la continuidad de la acera que a su lado pasa. Dicho con las palabras con que una periodista local da la noticia, el caserío “invade parte del terreno por el que debería transcurrir la acera”. Vamos, que en el tiempo que llevan acondicionando este tramo de la antigua carretera N-625, el caserío ha ido avanzando e invadiendo la zona de la futura acera. ¡Milagros de la naturaleza!
Este tramo de carretera que comienza a la altura del Palacio de Justicia y termina en el final del barrio de San José o Zabaleko, tras perder su sentido de carretera, al ser trasladada la misma al extrarradio del centro urbano de Amurrio, se ha convertido en una calle más del pueblo. Para ello, para darle una estética de tal, el Ayuntamiento anterior comenzó las obras de transformación y, consiguientemente, de renovación de la carretera en calle. Entre otras actuaciones, el estrechamiento de la calzada, al dejar de ser ya una carretera convencional.
Con malla tras el paso de la ciclo génesis |
Pero hete aquí, que el caserío ahora –en una situación anterior, no era mayor obstáculo–, incluso con el estrechamiento de la calzada que posibilita mejorar la acera que transita a su lado y que al otro lado de la misma la acera reservada en anchura es mucho mayor, estorba y es necesario su derribo.
Y una cosa que menos se entiende es que ahora, que por dicha calle el tráfico de vehículos es mucho menor, pues ya no es carretera obligada de paso, se tenga que derribar. Derribo que igual estuviera justificado cuando junto a sus gruesos muros pasaba la carretera del Señorío, es decir, la carretera denominada después N-625. Hoy los argumentos a favor de su derribo no se sostienen.