viernes, 7 de junio de 2024

Ángel y la escultura GUK

 

 

 

Por unos días, GUK se ve arropado de sendos paneles con base firme y circular que le saludan y rodean y, a la vez, realzan aún más la escultura embajadora de Amurrio


Ángel y la escultura GUK

En la tarde de este domingo (02/06/2024) ha tenido lugar en Amurrio Antzokia el homenaje que el Ayuntamiento y el pueblo de Amurrio han tributado al escultor y creador de la escultura GUK, Ángel Camino, fallecido hace dos años. (En el siguiente enlace, hicimos un recordatorio al conocer su muerte repentina en el mes de julio de 2022 la-escultura-guk-se-ha-quedado-huérfana).

Homenaje que se celebra, precisamente a los 21 años en que dicha escultura lleva enraizada en el oficializado parque Juan Urrutia (para nosotros siempre será parque Pitiminí) de Amurrio, concretamente, desde el año 2003.

En dicho cine-teatro se han proyectado dos cortos documentales que se hicieron casi paralelos en el tiempo a la instalación de la escultura; en uno de ellos nos habla el propio Ángel Camino de su vida de escultor y artista. “Guk” y “El taller de artista” son sus títulos.

El acto ha estado dirigido y presentado en todo momento por la periodista y locutora de radio Iratxe Estrada, destacando su buen hacer en la comunicación con el público asistente, y acompañado de la actuación de tres jóvenes promesas femeninas de la música de cámara.

 

 

 

Tríptico impreso para la ocasión con los actos a desarrollar con motivo de los 21 años de estancia de la escultura GUK en el parque Pitiminí de Amurrio

 

 

 

Tomó la palabra Pablo R. Isasi, amigo de Ángel y alcalde en la época en que se fraguó y se hizo realidad la escultura GUK, que terminó su intervención dejando caer, a las autoridades locales presentes, su propuesta de dedicar una calle a la persona de nuestro protagonista de hoy.

Igualmente, intervino el actual alcalde, José Ramón Molinuevo, agradeciendo la presencia de los invitados, de Mercedes, viuda de Ángel y del director de los cortos cinematográficos, atreviéndose a leer unas frases en catalán, país donde residenciaba Ángel hasta el día de su muerte.

Tomaron también la palabra el director de los cortos y la viuda que, durante unos breves minutos, fueron entrevistados por la presentadora del acto en torno a la vida, vivencias y relación mantenida con el escultor; al igual que Raisa Álava, joven ilustradora zuhatzarra galardonada con varios premios que, en sus inicios artísticos, conoció a Ángel e interrelacionó con él.

En recuerdo y homenaje de este día, le fue entregado a su viuda, Mercedes, una placa conmemorativa que representa la escultura GUK en tamaño más asequible para poder presidir la vitrina o mesa de su hogar y le recuerde la maravillosa y gigantesca escultura que su marido quiso dejar a perpetuidad, para disfrute de las y los amurriarras, en su pueblo de adopción.

Al final del acto todos los presentes fueron invitados a una copa de txakoli “Eukeni” o/y “UNO” y el obsequio o regalo de la misma copa.

La escultura GUK, que hace pocos meses recibió un lavado de cara para devolverle el esplendor de los años pasados, 21 años lleva saludándonos todos los días, desde que se instalara en la primavera de 2003.

Hoy día, ha quedado como símbolo (esperemos que vengan otras que iluminen y embellezcan el paisaje urbano), haciendo de reclamo y distinción del pueblo de Amurrio.

Popularmente, es punto de quedada en las citas de grupos deportivos y, en general, centro para todo tipo de actos, eventos, concentraciones y actos mitineros, y puerta principal de acceso al parque Pitiminí.

A lo largo de este mes de junio están expuestos junto a GUK diversos paneles con imágenes que, rodeando al mismo, reflejan los pasos dados para el ensamblaje y colocación de la escultura en dicho espacio. Imágenes del artista amurriarra Mario Paniego, bajo el título “Guk, 21 años de Historia”.

Y los próximos sábados 8 y 15 de junio habrá visitas guiadas sobre la historia de GUK a las 13:00. Quedando, para no perder la costumbre y como es lógico suponer, en el GUK.

Como curiosidad e información desconocida por muchos, el lugar que ahora ocupa la escultura GUK, estuvo ocupado durante un tiempo por una farola de color negro de cuatro brazos estilo Fernando VII, cercada por un pequeño perímetro de tierra con flores.


Terminamos con las palabras del propio Ángel:

GUK está relacionado con una parte de mi vida, con ese “Lugar”, Amurrio, donde están mis recuerdos…

He visto crecer Amurrio desde lejos, transformarse desde un núcleo de vecinos separados hasta tener un centro histórico.

Con GUK me propuse hacer algo que fuera más allá del tiempo y del momento, algo que tuviera que ver con la esencia misma de sus habitantes, con el paisaje y el país.

Eché mano de mis recuerdos, de los montes, de los árboles, del verde, de la lluvia, de mis amigos…

Recurrí también a las costumbres, al idioma, al pensamiento y busqué una pieza que englobara, más allá del tiempo, ese espíritu del lugar.

Amurrio y su gente.

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