En vista de que el mes de agosto suele ser el mes de las vacaciones, me dije que yo también tenía que disfrutar de un merecido descanso, tomándome, para ello, unos días de asueto. Así que, pasadas las fiestas patronales de mi querido Amurrio, me dispuse a emprender un viaje en busca del ansiado descanso.
Habiendo oído a nuestra nueva alcaldesa Josune Irabien que, de vez en cuando, suele hacer alguna que otra escapada a España –País que acoge en su territorio un fabuloso y rico tesoro patrimonial e histórico, al igual que la simpar simpatía de sus gentes–, decidí que no iba a ser yo menos. Así que abandonando mi habitual morada en el parque Pitiminí de Amurrio, emprendí el viaje a dicho País. Como tampoco era cuestión de meter horas al volante del coche, decidí que la estancia sería cerca de Euskal Herria. Por tanto, me decanté por pasar unos días en Soria, tan cerca de nuestro País y tan desconocida para muchos de nosotros/as.
Para este viaje, casi de aventura por tierras de España me llevé a la criatura que, en su papel de copiloto, verificó el recorrido por medio del mapa impecablemente, salvo un pequeño despiste que nos hizo desandar el equívoco. La estancia duró apenas 5 días, debido a las limitaciones que me impuso la criatura, por lo que se puede afirmar que Soria se ha quedado como asignatura pendiente. Pendiente de aprobar y con nota alta en una próxima convocatoria vacacional.
El viaje se inició el 20 de agosto, sábado, a las 11:15 horas (un poco tarde para el día caluroso que se presentaba), dirección Vitoria-Gasteiz, Haro, Santo Domingo de la Calzada “donde cantó la gallina después de asada”, Ezkarai, … (Al ser sábado, en estos dos últimos pueblos, nuestro circular coincide con el mercadillo de los sábados. Día, por tanto, casi festivo por el fluir continuo de gentes por las calles). Prosigue por Valgañón, Pradoluengo, Alarcia … salpicado el recorrido de ermitas por aquí y por allá. Se bordean los embalses de Urquiza y Arlazón, donde el recorrido se hace algo pesado, por el calor y que se llevaban dos horas largas de coche.